Diario de viaje LATAM - llegada

 26/09/2024 Madrid

Me preguntan que cómo me siento; la verdad es que no lo sé. Me escudo en que la costumbre no me permite emocionarme hasta que estoy de lleno en la boca del león. 

Han sido casi dos semanas previas al viaje muy bonitas: Lorca con Carmen, Tula y Platón, noche de porros y charlas. La admiro tanto, su casa, su gusto por la decoración, su padre y lo que ha dejado en ella, el idilio de amor romántico que tiene y se merece. 
Luego mi madre, mi abuela y la boda de Marce con los bomberos, a pesar de la decepción de falta de baile y mangueras. El "eres especial" de Juan Carlos que me voy creyendo. Casi ver a mi hermana, pero sobre todo la paz entre nosotras.

Y ahora la casa de Manu y Julia, el trio, el safari, Chulvi e Ikram, el concierto de musica africana, marroqui, jazz y jam; los dos perros y los siete gatos, el billar, Rafa, y el bingo drag con Carlos y Ana. 

Ojalá este viaje retome escribir. Dedique tiempo a expresarme y sentirme. También a leer.

Buen viaje pequeña.

28/09/2024 Cancún

Me siento extraña. Perdida sin internet y con poca batería. Dicen que los mexicanos son amables, y en efecto los hay, igual que te encuentras esos otros a los que les molesta si quiera que les hables. 

Me siento sudada, empapada en cada pliegue. Este calor va a acabar conmigo y con suerte me pone morena. Otra lluvia de esas torrenciales como la que me ha caído a las 9am para que refresque un poquito. Como el encargado de la Residencia, como al llegar anoche, que te dicen: "hoy hace bueno, está fresquito". No mames si esto es fresquito... 

Quiero mi sim, ir a casa y organizarme alguna ruta. Esto de andar como pollo sin cabeza es raro, hace que se aviven todos los comentarios sobre la seguridad del lugar. "Actúa como si conocieras". 

He hecho una amiga argentina, de Rosario, Carla. Tal vez vayamos juntas a Holbox, y si no, al menos tengo una novata como yo con quien ir a la playa y hacer planes. Pero necesito internet, estoy perdida. Les doy la razón a los guías dinosaurio con eso de que las nuevas generaciones no sabemos bien lo que es viajar. No es culpa nuestra que todo haya cambiado tanto, que llegues al aeropuerto y tropecientos muchachos te ofrezcan taxis con intención de quitarte lana. "Estos yucatecos (creo que se dice así) quieren hacerse ricos de la noche a la mañana" dijo anoche la hermana de Gloria. La policía nos paró dos veces con voluntad de que fuésemos extranjeros para sacarnos más cuartitos de lana. Creo que agradezco no haber alquilado coche, iría igual de perdida pero en carro. 

Miro el reloj, las 17h. Tampoco mi móvil se acostumbra a andar por acá. Siento que he perdido el día y apenas son las 10 de la mañana. Me queda una hora para que abran Telcel y eso que no es la pinche tarjeta que quiero. También tengo que cambiar pesos.

La gente me mira. Aquí sentada en una esquina, refugiada del sol por una columna y ahora unas nubes que me dan algo de tregua. Extraño estar con alguien, yo, la solitaria. Es difícil estar fuera y lejos de casa. Mis papás andarán preocupados, o viven así, quién sabe. Los colectivos viajan con las puertas abiertas, ¿será que no tienen aire acondicionado y así les da fresco? 

No manches la de gente que vino a quejarse a Europa y lo de acá es tremendo. Fachadas de lujo y aceras de pobres. Basura. Olores fuertes. Puestos de comida callejeros. Tengo respeto a probar según qué comida aunque ayer superé alguna prueba con el picante. Tengo respeto y poco apetito viajando. Llamadme rara. No valgo para el turismo gastronómico, tengo cero de sibarita. "¿Quieres habana 7 o....?" No tengo ni idea, tu ponme alcohol y ya está. 

Con el café veremos qué tal. Menos mal que he pedido para desayunar de 8oz porque de 20 me bañaba en café wey. 

Me he tenido que poner sujetador, vaya a ser que se me note lo turista en los pezones. 

Hay más perros en México de lo que me esperaba, muchos van sueltos. También música, tienen muy buen gusto. En la Rosa Negra anoche la chavona pinchaba buen house, tech y mi conocimiento de música no me permite desfrirar otros géneros . Mi madre hubiese bailado y shazameado todo seguro. Tengo que hacer más shazam (cuando tenga internet). Ya va quedando menos.

Karla y Gloria, tremendas. Me recogieron en el aeropuerto con Dorothy para llevarme a cenar. Cenamos unas tostas de atún muy ricas, un poco de pulpo (la cantidad de pulpo en el plato se ve que no varía de un continente a otro, siempre escueto) y un guacamole riquísimo, con tortas de maíz y todos los platos acompañados de aguacate. Dos mojitos de fresa, un tequila y otro tequila de fuego (por el espectáculo), mucha mujer bella bailando, los hombres no tanto, mucho africano y extranjero. Buen lugar pero caro, unos 72€ cabeza, 4600 pesos aprox. Me invitan, son esplendidas. Vamos al aeropuerto de nuevo a buscar a la hermana de Gloria que viene con Ernestita. Desde que salí de casa me he rodeado con perritos y es una sensación muy agradable. Django te echo de menos, no me odies, o si, un poquito me lo merezco. Solo quiéreme igual cuando vuelva. 

Me llevaron a la Residencia donde está el apartamento, o departamento como dicen aquí, que me reservaron para toda la semana. 

Llueve otra vez y tardo en escribir porque el teclado se vuelve loco.

El apartamento es precioso, con cocina, salón, baño grande y cama a la par. Me ha personalizado una gorra que reza "Bienvenida bichito" una bolsa de playa que no sé si es del departamento o un regalo porque sabe que no me cabe nada más en la mochila, y un libro hermoso "el castillo ambulante". Además me deja 2090 pesos. No me merezco tanto. 

Me levanto, lloro un poco. Tengo que organizarme. 

Me ducho con música de fondo de la smart tv (menos mal), tengo que empezar a escuchar rancheritas. La sensación de ahogo disminuye, cojo las riendas y me aclaro. ¿Qué me pongo? Lluvia 80%, humedad 80%, sensación termina 30 grados. Me doy cuenta que por mucho que viaje uno nunca sabe hacer una maleta bien. Me sobra ropa, me faltan cables con conector Usb y no tipo C. Y recuerdo que todo cambia muy deprisa y que se complica todo, más cuando tienes 3 emails y poco almacenamiento. Odio la burocracia y las obligaciones de usuario. 

Que divertido, un gato cagando en medio de la calle. Cagar prima frente al casi atropellamiento. 

Me llevo la riñonera pequeña con lo justo. Creo que mi mayor miedo es que me roben. Preparo la pegatina de Honzak para cumplir con el recorrido y hacerlos mundiales. No me llevo la cámara, es demasiado pronto para notarse tan turista. Por poco ni sé salir de la Residencia, que tiene una galería de arte hermosa que tengo que grabar y fotografiar antes de irme.

Desayuno delante de la Residencia, donde está Carla. Me tratan genial y tienen mucho donde elegir, pero es pronto y tengo el estómago cerrado. Café americanísimo con un poco de leche y miel natural acompañado de un croissant que no es gran cosa pero mojado en café me sirve. 'Platico' con Carla, es acuario, lleva apenas un par de semanas y ya anda laburando. No había salido hasta el momento de Argentina, es lesbiana o bi porque me habla de su exnovia, 28 años como yo. "Vendré a desayunar todos los dias", les digo, y es probable que cumpla. Me faltarán platos por probar aún y así. Pago 120 pesos, unos 5,5€ con propina. Es un poco caro pero son muy amables. 

Carla es escritora (por cierto todo va de Carlas?) Y estoy pensando en regalarle la libreta que traigo para aligerar peso, y para que, así como estoy haciendo, utilice otros medios para escribir. Si no, creo que no conseguiré escribir tanto. Necesito aligerar. 

He conseguido el adaptador para la corriente, ya puedo cargar el teléfono. Seis dolares en una tienda de souvenirs. Era necesario y por suerte tengo dolares de las propinas que fui guardando como guía.  

Sigue quedando media hora, voy a probar a desayunar por segunda vez.