A toro pasado

 ¿Debería escribir o no debería?

Sin embargo esos segundos hasta que preparas la pluma son eternos.

La taquicardia, los sonidos agravados, mi perro en la puerta. Ahora tumbado detrás.

Montse y yo tenemos algo especial.

Ella tiene algo de Aries de su hermana en mí y es lo que la convierte en la mía. Eso, y que también necesita una hermana mayor.

Mi relación con Palomo es igual, pero en hombre. 

Los dos igual de vagos jajaja dime con quién andas y te diré quién eres.

Me doy miedo de mi misma.

De coger trenes, y no en grandes decisiones de la vida. Si no en las pequeñas de ir a una charla sobre respiración en el habla o ir más a la Tertulia. Hacer cosas, sola. Conocer gente. 

Tener más grupos de whatsapp y agobiarme por ello.

Pero es solo mi cabeza.

Al final Montse no disfruta conmigo como lo haría con otras personas. También ella se acomoda.

Y mi dilema es, escribo para retorcerme en esta bohemia de humo o para seguir postergando lo que sea que esté postergando.

Son tantas cosas.

Y todavía no sé ir tan rápido.

2 de septiembre.

Leo lo escrito en julio y me retuerzo. El tiempo avanza, una hablando de evolucionar y, sin embargo, las cosas siguen siendo un poco como siempre. Supongo que es lo que llamamos esencia.

Así que decido publicar finalmente aquello por lo que un día me retraje de hacerlo.